Después del prólogo del 31 de diciembre, con salida en el Sea Camp y una duración de 11 km tocaba encarar la primera etapa.
Un enlace de 234 km y una especial de 367 km que pusieron las cosas difíciles al PBX Dakar Team. Un problema en el turbo, que se intentó solventar bajando las presiones de los neumáticos para no forzar el motor condicionó toda la jornada y acabó derivando en un pinchazo, que hizo imposible llegar con seguridad al final de la especial.
A pesar de los contratiempos, el espíritu de ayuda del PBX Dakar Team es imparable y, además de asistir a un SVS averiado, en su regreso al vivac también remolcaron a una moto 70 km que se había quedado sin gasolina.
La penalización de 19 horas ha mandado al PBX Dakar Team a los puestos de la cola en la clasificación, pero en el Dakar lo importante es cómo se acaba, no cómo se empieza. Es una carrera muy larga y los primeros kilómetros no marcan grandes diferencias, solo nos dejan entrever la soltura de los pilotos y, sobre todo, cómo afrontarán las próximas etapas en función del resultado obtenido. Y nosotros tenemos claro que somos un gran equipo y nos queda mucho por luchar. ¡Ánimo, PBX Dakar Team!